Aunque el tener un pequeño acuario no es una tarea que
requiera de conocimientos o entrenamiento especiales, tiene algunos puntos
clave en los que alguna vez fallamos ya sea por novatez o falta de información.
Lo primero que queremos hacer cuando notamos que el agua
está turbia es cambiarla toda, lavar el filtro e incluso lavar la grava y
accesorios con jabón para quitar las algas que se hayan formado, lo que hay que
hacer es cambiar del 20 al 30 por ciento del agua y sifonear la pecera.
Importante es saber la compatibilidad de los peces, si
compramos por ejemplo un pez beta y lo ponemos en nuestra pecera comunitaria lo
que pasará es que lo veremos matar a nuestros demás peces.
Evita la sobrealimentación, los peces se alimentan de dos a
tres veces al día, otro punto a cuidar es la grava de colores, aunque es llamativa
al ponerla en el acuario se va a despintar, la pintura es tóxica y quedara en
el agua de nuestra pecera, ocasionando muerte a nuestros peces.
Hay peces que requieren agua fría y otra agua tropical
(caliente), para cuidar la salud e integridad de nuestros peces hay que
respetar su ambiente natural.
Cuando adquieras tu acuario te recomendamos evitar aquellos
de forma circular, estos no son otra cosa que maltrato animal, es como comprar
un perro activo por naturaleza y amarrarlo a un poste para confinarlo allí, es
matar a los animalitos de forma lenta y cruel.
Te recomendamos estar al pendiente de la oxigenación del
agua en la población de tu acuario, que la demanda tu oxígeno sea siempre un
poco mayor a la de necesaria en tu población de peces, en caso de que no sea así,
revisa la capacidad de tu bomba, puedes incluir también plantas naturales en el
acuario ya que estas son productoras de este elemento tan importante y al mismo
tiempo que pueden ser alimento de tus mascotas.
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